jueves, 28 de abril de 2011

¿CUANTO DURARA ESTE BLOG? HASTA QUE LA LEY LLERAS LO PERMITA.



La primera reseña de este blog fue EL BUENO, EL MALO Y EL RARO (Joheunnom nabbeunnom isanghannom) Western atípico que a medio camino entre una película de aventuras y la acción asiática más pura quiso realizar un remake/homenaje a la obra del director  Sergio Leone. Nos encontramos frente a  una película demasiado estrafalaria como para atraer a las distribuidoras de cine comercial o muy liviana como para las centralizadas en lo que llaman cine arte. Es así que su visionado resuelta casi imposible por los canales oficiales por lo que es inevitable recurrir a caminos no tan ortodoxos pero miles de veces más efectivos. O sea (dejando las  poses a un lado), Internet, único medio con el cual disponemos quienes no contamos con los recursos económicos para comprar las versiones originales de dichas películas, o que vivimos en regiones apartadas donde no existe una tienda o librería decente.

No solo hablo de películas, también de otras manifestaciones artísticas y culturales que no tienen cabida en nuestro contexto, ya sea por el completo desinterés del estado en ofrecer vías para su acceso o porque su precio y accesibilidad dificultan su comercialización (al menos en nuestro país), hablo de libros, comic books o música que no se obtienen mediante los medios habituales, que necesitan mercados especializados para su correcta distribución, mercados que son inexistentes o cerrados a círculos más “privilegiados”.

Ya quiero poder leer esta obra en mi
biblioteca  local gracias a la ley Lleras.
Por otro lado Colombia no se encuentra precisamente abierta a toda clase de alternativas culturales, tampoco brinda facilidades a todas las muestras artísticas, posturas, o géneros del arte. Si nos ponemos a pensar detenidamente nos damos cuenta que en nuestro país solo se alientan aquellas muestras que dan lucro, o que estén de moda, situación que se aplica tanto para las instituciones públicas como privadas. Para empeorar las cosas las grandes empresas, o rubros estatales, se concentran en las ciudades capitales. Bogotá, Cali, Medellín pueden presumir de sus festivales, teatros, bibliotecas, tiendas o librerías especializadas, las personas que vivimos en zonas apartadas debemos conformarnos con las pequeñas (y brillantes) sorpresas que suelen darnos las tiendas locales o con las riesgosas expediciones de unos pocos comerciantes. No quiero decir que solo las ciudades nombradas gozan de salidas culturales decentes, tampoco que las restantes poblaciones sean caseríos sin dios ni ley. Tenemos teatros, salas de cine, librerías y bibliotecas,  pero todas centradas en una restringida oferta cultural la cual solo es suplida en su totalidad gracias a Internet. ¿Qué pasaría si esta herramienta es bloqueada o restringida en su uso? ¿Qué pasaría si de un día para otro descubrimos que el único medio que nos permitía tener acceso a las grandes obras que valoramos tanto (pero otros no), es cerrada?

El arte y la cultura se pronuncian a partir de millares de formas y manifestaciones y no existe lugar en el mundo con los medios suficientes para que las personas puedan acceder físicamente a todas ellas. Es así que quienes no vemos cubiertas nuestras necesidades por la oferta local, debemos acudir forzosamente a la red (ruego que quien lea esto no sea un mente sucia). Si la Internet es restringida se estaría dando en la práctica una homogeneización de la cultura, en la cual solo las manifestaciones patrocinadas por el estado o comercializadas por las grandes industrias serian las únicas que podremos disfrutar. ¿De pronto no sintieron un escalofrió?

¿Cuales serán las muestras artísticas que se nos permitirá ver?
Ruego al altísimo que esta no sea una de ellas.
Ahora entremos en uno de los puntos más delicados: el dinero. El capital, que es lo que en realidad quiere defender este mamotreto de norma. La pregunta es ¿el dinero de quien? No  del consumidor, quien ya está desbordado con los impuestos que pesan sobre libros, DVDs etc.   Pero si el de las grandes disqueras, editoriales, o distribuidoras de cine, quienes serán las únicas beneficiadas. Uno de los de los argumentos utilizados para defender la Ley Lleras (o proyecto de Ley 241 de 2011 para los de saco y corbata) es que el beneficio económico que reciban estas multinacionales se traducirá en beneficio para todos los consumidores en general. A mayor riqueza para las industrias, mayores inversiones en nuestro territorio,  mas tiendas, mayor oferta y mejores productos en calidad y cantidad. Pero no nos engañemos, la empresa privada solo invierte en aquellos temas donde la ganancia se encuentre garantizada. Para quienes disfrutamos del comic norteamericano (otro ejemplo) y que vivimos en un país como Colombia, el cual apenas empieza a despertar una verdadera pasión comiquera, sería prácticamente imposible imaginar que una editorial se arriesgue a distribuir material actualizado y en todas las regiones del territorio colombiano (no nos olvidemos el carácter centralista de nuestro país).  El fandom nacional se vería obligado a adquirir las obras originales a precios imposibles (si es que deseamos seguir paso a paso a las editoriales gringas, tal como lo hacemos en la actualidad gracias a Internet) y tal vez ni siquiera traducidas en nuestro idioma. En el peor de los casos tendríamos que olvidar nuestra afición por falta de recursos y medios de acceso.

Quienes redactaron la dichosa ley parecen olvidar el efecto democratizador que tiene la Internet, la cual permite un acceso libre y sin restricciones a todo tipo de manifestaciones culturales y artísticas sin que importe la situación económica del usuario. En vez de bloquear su uso, ¡¡¿No seria más correcto convertir el acceso a Internet en un servicio público esencial el cual garantice una correcta distribución de la información y el conocimiento?!!

JHEP para presidente (o para ministro)
¡¡MARQUE 666!!
Este tema da para mucho, no hemos siquiera hablado de la supuesta criminalidad de las personas que alimentan la red con películas, vídeos, libros, música o comics; tampoco de la defensa a  los intereses de los artistas, el cual es otro de los  argumentos (tal vez el más fuerte) utilizado para defender la Ley Lleras. Como se está haciendo costumbre en este Blog tendremos que dejar un importante punto para una nueva oportunidad.

Mientras tantos solo les podemos recomendar que gocen su vida, coman sano, quieran a su mujer o marido y revisen los otros post de este humilde blog. Nos leemos la próxima  semana. 

lunes, 18 de abril de 2011

¿DE QUIÉN ES ESTE ROSTRO?


Su nombre es Jesse Heiman y aunque su aspecto no les sea familiar, es uno de los rostros más recurrentes en la actual filmografía estadounidense, tampoco sorprende que no lo conozcan  ya que su profesión es precisamente esa: pasar inadvertido. Jesse Heiman es un extra y en su currículo encontramos  un centenar de películas y series de televisión donde no hemos notado siquiera  la prominente figura del gordito. Jesse Heiman, como el resto de sus compañeros de profesión, se encarga de conformar la atmosfera de una escena, de darle realismo o servir de imagen de fondo; eso mientras las estrellas (mejor  vestidas y maquilladas) se lucen frente la cámara. Jesse Heiman parecía destinado a nunca ser reconocido, o eso parecía hasta que a través de Youtube  circulara un video con recortes de varias de sus participaciones en Cine y TV.


Sin que necesariamente se haya convertido en un fenómeno mediático (aunque no se descarta que lo sea) Jesse Heiman ha podido gracias a internet tener sus minutos de fama los cuales ha  saboreado mientras es entrevistado, aclamado y se ríen a sus expensas; como sucedió en The Tonight Show, el famoso programa estadounidense presentado por Jay Leno.

Sobre su vida los pocos datos que existen se obtienen dando un pequeño reposo por internet. Jesse Heiman nació en Boston el 23 de mayo de 1978, ciudad donde viviría hasta que en 1989 se mudara a Austin Texas. Asistió a la West Ridge Middle School y la Escuela Secundaria Westlake, no tenemos ni idea sobre  su infancia, aunque si nos dejamos llevar  por las películas y series de televisión gringas, podríamos suponer que se la paso soportando ofensas y chistes fáciles sobre su cara redonda y pálida. Se graduaría  en la Universidad Estatal de San Marcos en mayo de 2000 para mudarse inmediatamente a  Los Ángeles california. En noviembre de ese mismo año empezaría actuar como extra en películas, programas de televisión, anuncios y videos musicales. Su primer papel importante dice haberlo obtenido en American Pie 2, luego en  la serie "Maybe It's Me" la cual duro una única temporada y donde acaso pronuncio dos o tres frases.

Como dato curioso es de nombrar su participación en la serie LOST, donde no actuó como extra, pero si protagonizando un peculiar juego creado por sus productores.  En él, varias personas serian “reclutadas” para luego ver  material “secreto” y "exclusivo" de la serie. Heiman fue mostrado en una convención en San Diego como uno de los seleccionados, al rato Jesse Heiman (que se hacía llamar Dan Bronson) diría que grabo “clandestinamente” material revelado minutos antes y que estaba dispuesto a mostrarlo a todos los asistentes, durante la convención  se  dijo que Jesse Heiman (¿o Dan Bronson?) sería retirado del juego. La aparente movida publicitaria hizo que los fans de la serie se encariñaran con él, por lo que todavía es nombrada en foros y páginas dedicadas a la serie de televisión.


Jesse Heiman parece ser un tipo fanfarrón, o al menos así juzgaríamos  a una persona que no tiene reparos en repetir que es el extra más grande del  mundo, que crea y administra su propia página de fans en Facebook, que aparece frecuentemente en Youtube a través de videos que el mismo filma con su webcam y que desfila por toda la red con esta clase de fotografías.



Al  menos eso crearíamos si no tratásemos  de entender las motivaciones  que tiene un extra, las cuales en el fondo son hacerse notar. Muchos extras no están en dicha labor precisamente por la paga, la cual no tengo ni  idea a cuanto asciende, si no por un sueño el cual no comparto, pero que debo respetar, que es llegar a ser estrella. Así que si,  de entrada podríamos decir que Jesse Heiman es un presumido, un vanidoso o un tipo que se esfuerza demasiado por figurar. O mejor podríamos excusarlo (haciendo un poco de demagogia) y decir que sencillamente es un gordo enamorado del cine y la televisión.

Como sea la historia de Heiman no es la única o la más extraña, en realidad el mundo del espectáculo está lleno de personajes de lo mas bizarros, también de historias que parecerían imposibles, sobre todo en una industria aparentemente tan “seria” como es la gringa. Sería bueno dedicarle un espacio a todos esos novelones que se inventan arriba en el norte. Ojala encontremos la oportunidad.

sábado, 9 de abril de 2011

TENGO TIEMPO LIBRE...... Y NO ME AVERGÜENZA N°2



Bienvenidos de nuevo a la sección más absurda (y casi de relleno) de este humilde blog. Si en una primera oportunidad nos dedicamos a estropear la reputación del bigotudo más querido de los videojuegos, en esta ocasión nos concentraremos en las escenas eliminadas de uno de  los shows televisivos de mayor  trayectoria  después de Sábado Gigante y Dragon Ball Z.

¿Creíste haber visto todo sobre Los Simpsons? Pues aun no has tanteado sus escenas eliminadas. Aquí un pequeño repaso de las que consideramos las mejores.

Death Metal camionero:


Una vez escuche que Marge jamás tiene sus momentos, bueno tal vez porque los eliminan:


Al menos en Springfield la policía atiende el teléfono, de donde vengo…


Lo mejor siempre viene a lo último


Hay personas que se pasarían toda una vida hablando sobre el arte, la violencia y su influjo, yo prefiero mirar este video.


“Smithers ¿….” Miren ustedes el resto.


Y la mejor de todas. Lo que hizo el esfuerzo anterior una completa pérdida de tiempo.





“¡SI ESTAS SON LAS ESCENAS BORRADAS, LO DEMÁS DEBE SER ORO PURO!” 
Troy McClure


Bueno así finaliza este lapsus de vagancia. No se olviden dar un vistazo a los otros post. Tranquilos que esto apenas empieza, más adelante veremos cómo termina. 

Por lo pronto a esperar  la próxima semana, donde contaremos la historia del gordito buena onda más famoso de la historia y del que seguro no sabes ni su nombre. ¿Adivinan?

sábado, 2 de abril de 2011

SCOTT IAN: LOS CINCO GRANDES.



La Thrash Metalera anthrax tiene entre sus cabecillas al guitarrista y políticamente incorrecto Scott Ian, a quien ya tuve la oportunidad de ver acción cuando, en compañía de sus compinches, serviría de telonera a la legendaria iron maiden en su concierto del 7 de marzo de 2009 en la gozosa ciudad de Santa Fe de Bogotá (aquí para los escépticos).

Además de su continua participación en otras bandas y de las correrías propias del artista, Ian es también  fan acérrimo del noveno arte por lo que no dudo en responder a la web REVOLVER cuales considera las cinco obras que todo metalero (y amante del buen comic) debe poseer en sus anaqueles. Las cinco grandes a continuación:

'Watchmen'  de Alan Moore e ilustrada por Dave Gibbon. Obra la cual no vacila en calificar como “el mejor comic book jamás escrito” designación difícil de debatir por sus implicaciones, influencias y criticas por todos conocidas. También recomienda Ver la película, pero sólo después de leído el libro. "



El Joker de Brian Azzarello, y Lee Bermejo. O que es lo mismo Heath Ledger en un comic. Como millones de fans, Scott Ian se lamenta de la muerte del Joker definitivo, asegura que esta historia perfectamente “pudo ser la próxima película de Batman.Habría que consultar a Nolan si llego a considerar lo mismo.



300 por Frank Miller. "La "verdadera" historia del rey espartano Leónidas y sus 300 hombres.” O al menos eso es lo que le gusta creer a Ian, quien confiesa haber gritado durante toda una semana  “¡Esta noche cenaremos en el infierno!”  luego de leído el comic y visto la película.

Blackest Nigth por Geoff Johns y dibujada por Ivan Reis "Superhéroes Zombies traídos  a la vida por los Black Lanterns.  Soooooo metal!” ¿Que otro comentario podemos añadir?

La lista finaliza con Batman y Robin de  Grant Morrison y el arte de Frank Quitely. En lo cual podríamos estar de acuerdo en que es una excelente historia, ¿Aunque merecedora de incluirse en un listado de “los cinco mejores”? No sé, frente a gustos…


Sobre su lista causa impresión el que todas tengan relación casi exclusiva con la editorial DC (sin incluir la obra de Frank Miller la cual pertenece a dark horse). También sorprende lo relativamente reciente de cada una de ellas, salvo por watchmen y 300 las cuales llevan casi  24  y 10 años de publicadas, todas provienen máximo del 2008. También asombra lo “obvias” o conocidas que pueden resultar sus preferencias, es decir, son obras que en su mayoría ya han tenido un traspaso bastante comentado al cine (o son relacionadas directamente como un producto cinematográfico como es EL JOKER), o sus consecuencias todavía se sienten muy cerca en sus respectivas historias. Después de todo Morrison sigue siendo el escritor principal de Batman y la “resurrección” del hombre  murciélago es un evento cercano; por otro lado ni siquiera ha finalizado Brightest Day, continuación directa de la saga construida por Geoff Johns.

Claro que no nos encontramos frente a un intelectual aburrido o critico presuntuoso, si no con el guitarrista líder de la brutal ANTHRAX banda legendaria dentro del Thrash Metal y referencia marcada para todos los que gozamos del genero, por lo que no sorprendería que sus gustos e influencias sean a la vez reflejo del estilo desenfadado que demuestra cada vez que sube a un escenario.

También cabe resaltar que Scott Ian no solo se ha declarado lector habitual de  comics, también fue llamado por la DC (¿vendrán de ahí sus preferencias?) para guionizar una miniserie especial de dos números del personaje más “metacho” de la editorial gringa. En Lobo: Highway to Hell,  Scott Ian mostraría al último Czarniano en un viaje de ida y vuelta a los infiernos para enfrentarse con el mismísimo  Satanás en busca de retribución  y venganza.

Comic que merece la pena ser leído no solo por la curiosidad que despierta su escritor, si no también por una historia, que si bien decae en su segundo número, entretiene con las sucias aventuras de un tipo que no muestra ningún tipo de consideración cuando se trata de desmembrar todo lo que se atreviese en su camino.

Por otro lado nos enteramos que el guitarrista  ha sido nuevamente convocado, esta vez para escribir a Etrigan el Demonio, serie que también será dibujada por Sam Kieth  el mismo que lo acompañaría durante la ejecución de Lobo: Highway to Hell. Sobra decir que esperamos impacientes.

Luego de esto suponemos que Scott Ian no es el lector presuntuoso que puede pasar horas refiriéndose al entorno Underground, a Harvey Pekar y Art Spiegelman, eso  mientras te llena la cabeza con un montón de referencias posmodernistas y seudo freudianas (básicamente lo que hicimos un post más abajo). Es un fan como lo somos nosotros, los cuales la pasamos dichosos con una historia bien contada que a su vez nos divierta. Y es que el comic no solo es  el noveno arte, también es una forma de entretenimiento.

 ¿Quién iba a imaginar que  este post serviría también  para este tipo de reflexiones?